El Medio Oriente está conformado por muchos países que poseen ciudades con un gran peso histórico, que hace que los turistas sean atraídos por su historia, paisajes y sobre todo lo que hay detrás de cada muro, estructura, castillo o puerto. En esta oportunidad, hablaremos de una ciudad emblemática, llena de historia y que es considerada la primera ciudad poblada del Medio Oriente, esta es Biblos.
La ciudad de Biblos que es la antigua ciudad del territorio de Canaán, se encuentra situada a 40 km de Beirut. Esta recibe su nombre gracias a los libaneses con un nombre árabe llamado Jbeil (que significa montaña pequeña), y pese a que sus antepasados la bautizaran como Gubla (montaña grande). Las excavaciones de Dunand pusieron de manifiesto que hubo giblitas al menos desde el VII milenio a. C.
Esta ciudad según estudios realizados indica que sus habitantes vivían en chozas circulares de un solo bloque de piedra, las cuales posteriormente se transformarían en edificaciones rectangulares con habitaciones. En cuanto a la manera en que mantenían su economía, los habitantes de Biblos basaban su economía en la agricultura, el pastoreo y, en parte, la pesca; y enterraban a sus muertos en grandes ánforas. Poco antes de la Edad del Bronce, Biblos inició una próspera relación comercial con Egipto, que denominó a su aliado Kubna.
Asimismo, con el pasar del tiempo la ciudad se convirtió en un gran centro de peregrinación, estatus que se mantuvo durante siglos para los diferentes pueblos que la invadieron. Dentro de los restos que consiguieron los arqueólogos sobre arquitectura religiosa de principios de la Edad del Bronce, lo constituye el Templo de Baalat Gebal, Señora de Biblos, que Montet bautizó como Templo egipcio por la cantidad de exvotos de este estilo que encontró bajo su pavimento.
A comienzos del III milenio a.C. Biblos comenzó a desarrollarse como potencia comercial en el Mediterráneo. Exportaba la preciada madera de sus cedros a otros puntos del mar y, de forma muy especial, a Egipto que la utilizaban para sus barcos, sus templos y sus rituales funerarios. A cambio de su madera, Biblos obtenía vajillas, joyas, papiro y lino.
Actualmente, Biblos es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, reconocimiento dado en el año de 1984 por su condición de ser una de las ciudades más antiguas del mundo y porque se trata de uno de los pocos lugares del mundo en que han sido representados todos los períodos de la historia.
Ya para el año 2014, la ciudad ganó el Premio Golden Apple, otorgado por la Federación Internacional de Periodistas y Escritores de Turismo (FIJET) por excelencia en turismo y, en 2016, fue elegida como Capital del Turismo Árabe por el Consejo Árabe de Turismo.
En otro orden de ideas, no queremos dejar de compartirles dos lugares que deben conocer al momento de visitar esta ciudad:
Es un pequeño templo maronita en una callecita cercana a la autopista. Aunque las reliquias de la santa no descansan aquí, se trata de una niña mártir que despierta gran devoción entre los habitantes de la zona.
- Castillo de los Cruzados de Biblos
Este se puede visualizar sin problemas a larga distancia, y es considerado un emblemático castillo puesto a que es un castillo cruzado del siglo XII que se construyó con piedra procedente de las ruinas romanas de la ciudad. Se encuentra rodeada por un foso, y el mismo fue capturado por Saladino que destruyó gran parte de sus murallas. Más tarde, los cruzados volvieron a reconstruir la fortaleza en 1197.
El castillo posee un pequeño museo que alberga alguno de los hallazgos en las ruinas colindantes, aunque las piezas más importantes se encuentran en el Museo Nacional de Beirut.